HE ALUNIZADO
Cuando
tu nombre se cruza por mi cabeza, un segundo es suficiente para desaparecer de
mi oficina y volar hasta la luna y desde allá mirarte.
Como una pastilla bajo mi lengua provocando un viaje que
no tiene garantizado un boleto de regreso; algo así es cuando te enamoras. Vas sin garantías, a ciegas, entusiasmado e idealizado.
Enamorarme de ti es como un efecto psicodélico,
altamente ilegal, sustancia recreativa y causante de altos grados de ansiedad tan altos, como una fiebre que ni el termómetro puede medir.
Gracias a ti he pisado la luna y, aunque no apareceré
en los libros de historia como Neil Armstrong; la única que quiero contar es la
de nosotros.
Quiero dejar una bandera de paz y mandar a la órbita las discusiones tontas.
Quiero dejar una bandera de paz y mandar a la órbita las discusiones tontas.
¡Houston, tenemos un problema!, porque he
alunizado sin ayuda de cohetes ni naves espaciales y no tuve gastar miles de
millones de dólares para tocar la luna; bastó un beso y unas cuántas promesas aun por cumplir.
¿Y tú? sigues tan lejos como la luna de la Tierra. Me parece que he alucinado mientras he alunizado, y tan solo poniéndome a pensar en ti.
La espera puede ser como una sala de torturas ¿sabes?. Mis nervios colapsan, mis músculos se vuelven débiles, mis piernas se niegan a sostenerme y mi corazón late con tan poca precisión, que parece un reloj despertador a punto de ser apagado.
La espera puede ser como una sala de torturas ¿sabes?. Mis nervios colapsan, mis músculos se vuelven débiles, mis piernas se niegan a sostenerme y mi corazón late con tan poca precisión, que parece un reloj despertador a punto de ser apagado.
¡No necesito
que me bajes las estrellas! ¡Necesito que me las hagas ver!, con unos cuantos
besos y abrazos sinceros, mientras nos desnudamos en tus tierras o en las mías. Mi pasado no significa una bomba de tiempo, no necesitas habilidades de
ingeniero electrónico para desactivarla.
Seré yo la luna, y tú serás el primero en poner
un pie en ella como el astronauta que he estado esperando mientras me hacia
menguante.
Sé que he alunizado cuando respondes a mis
conversaciones y detectas mis intenciones.
No necesito otra cosa que no sea la luna para verte desde allá y, si todo esto está escrito en algún libro de historia futurista, entonces se hará en su debido momento.
Paciencia.
Y dime ¿ya has alunizado?
No necesito otra cosa que no sea la luna para verte desde allá y, si todo esto está escrito en algún libro de historia futurista, entonces se hará en su debido momento.
Paciencia.
Y dime ¿ya has alunizado?
Por Carlos Gerzon
Instagram: @elchicodelbusblog
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