SEX O'CLOCK Cap. 4 NEURÓTICO
El cielo se tornó colorido como un helado de tres sabores combinado en una copa derritiéndose bajo el sol. Colores rojizos, rosados y un poco de celeste bebé. Aquella vista me produciría paz certera en un día cualquiera, sin embargo hoy fue complicado lograr ese estado de animo. Me sentí ansioso, como perseguido y acechado. Tenía la sensación que cada movimiento en falso podría detonar un solo de sirenas de los patrulleros. Ignacio decidió pasar por mí en la puerta del edificio donde se encuentra la oficina donde trabajo, para irnos juntos al sur. Recogí mi lap top para avanzar con un reporte antes de volver de vacaciones la próxima semana. Ignacio pretendía quedarse los días que restaban para cumplir con el contrato de alquiler. Yo solo ansiaba recoger mis cosas y no volver por allí. Aunque horas más tarde Ignacio me convencería de quedarme una noche más. - ¡Qué tal cara de huevón traes! Vamos a ...