CóMO OLVIDARSE DE ALGUIEN QUE TE DIJO NO

No nos deja avanzar ese recuerdo permanente. A veces quisiéramos no sentir nada, ser como una roca porque esa voz se acomoda en tu oído y encuentra las palabras que te dijo para obtener lo que quería, mientras que lo que tu querías era gustarle.

Si ya intestaste y arriesgaste, te la jugaste y aun así obtuviste un NO tamaño de Júpiter, entonces no nos queda más que otra salida, la más dura, TRATAR DE NO PENSAR EN ESE ALGUIEN.

¿Puede haber tarea más titánica que esa? ¿Puede existir algo más difícil que eso?

Como eliminas de tu mente esa imagen que se proyecta incesantemente, marcada con tinta indeleble, tinta china, en tonos fosforescente que no deja de resplandecer iluminando todo tu cerebro de imágenes de cuando estaban juntos.

Eso es tortura por decisión propia.  Me imagino en la situación de muchos que como yo estuvieron invirtiendo tiempo, sentimientos y expectativas las cuales nos salieron con tasas de interés muy altas, pagando un precio tremendo, la desilusión en quiebra. 

Muchas veces un clavo saca otro clavo, y otras te clavan dejando atrás tus sentimentalismos y dedicarte a vivir la vida de soltero suelto en la ciudad con ganas de vivir el momento y no pensar en el mañana. No pensar en el pasado que tiene el nombre de esa persona que aun hace daño en nuestra cabeza.

La verdad es que cuesta aceptar que tienes que olvidarte de ese alguien porque no le gustas. Aquí conozco algunas fórmulas que me han funcionado:

Trabaja, estudia y mantén tu mente ocupada, piensa en tu vida profesional, familiar  y personal, hay más ámbitos muchos más importantes que el amoroso. Todo debe tener un balance, pero si insistes en poner todos los kilos en alguien que no da ni un gramo por ti, entonces estarás desequilibrado emocionalmente.

No recuerdes lo bonito y maximiza lo horrible, recuerda las veces que salieron juntos y su pésimo comportamiento, su trato de bestia, su arrogancia o todo eso que detestas. No todo es color de rosa así que no te pases la vida maquillando y pintando de color pastel lo que es más agrio que un limón.

¡Ponle huevos carajo! Así es. Olvidarse de alguien es todo un campeonato en el cual uno debe dar lo mejor de sí. Si quieres olvidar porque tienes que hacerlo entonces tienes que esforzarte. Esa persona no se borrará mágicamente de tu vida, tienes que hacerlo mentalmente, no estás en un eterno resplandor de una mente sin recuerdos. Esto es vida real.

Escucha a tu corazón y usa tu intuición. Sabes ¿Qué es peor que escuchar un NO? Sentir un NO. Adivinarlo o suponerlo por los hechos y las cosas que esa persona te dice no directamente, pero dándote a entender que “NO” es la respuesta que buscabas a la pregunta “¿Te gusto?” Si ya diagnosticaste esto desde el principio entonces detenlo antes que avance como un mortal cáncer.

Si después de todo no puedes olvidar o sigues creyendo que hay un posible chance entre los dos, entonces lo que tienes es un caso de obsesión. Porque siempre quieres, te empeñas e insistes en fijarte en aquella persona que te dice No como un eco.  Si eres alérgico a los NO evítalos. Si te rehúsas a ver lo evidente, dolerá más que una bala directo al pecho pues ese dolor se va, pero el rechazo se queda quien sabe hasta cuándo. No hay peor ciego que el que no quiere ver. Si insistes dejar tu dignidad por algo que crees que es felicidad, no serás feliz.

Por Carlos Gerzon

Instagram: @elchicodelbusblog 

Facebook: @elchicodelbusblog