AUSENCIA
No tengo ni un solo recuerdo tuyo, y todo lo
que sabias sobre mí esta muy distante a la realidad. Hoy soy tan diferente a
como me dejaste, no queda ni un pelo de ese bebé.
Mi alma tiene matices desconocidas para el pantone. Mis ojos más humedad que una pared
salitrada cerca al mar. Mis errores tienen una tarjeta de crédito ilimitada y
ya me gasté todo el saldo.
A estas alturas no hay culpables más que mis decisiones.
Un adjetivo que me ha acompañado en etapas
jodidas es “sobrevivir” porque aguantar tantas maniobras del destino es algo más
heroico que las huevadas de Marvel. Y
no, no me hago la victima, solo quiero recordarte que muchas veces somos lo que
somos no solo por nuestras decisiones sino por las acciones de terceros que no
comprenden la diferencia entre algunas personas de otras.
Te cuento que yo aun sigo persiguiendo todos
esos sueños que parecen rebeldes sin causa y quieren escabullirse por mis manos
como agua. Aun tengo esos tres sueños grandes, el tercero es quizá el culpable
principal de las consecuencias, encontrar alguien cuyo corazón sincronice con
el mío como dos relojes suizos es tan difícil como encontrar vida en Marte.
Te cuento que hay un nuevo integrante en la
familia, es una cachorra que rescate de la calle, ya tiene un mes con nosotros.
Me parezco un poco a ella, esperando que alguien me rescate.
Te cuento que estoy bien, pero siguen
existiendo esos momentos oscuros que llegan sin avisar y me hunden en un apagón
donde cada vez, felizmente, es más fácil encontrar la luz.
Yo sé que debes estar molesto conmigo, lo sé.
Yo sé que te he fallado y no solo a ti, pero estoy tratando de remediarlo todo,
estoy siendo una mejor de mi mismo. Estoy tomando las decisiones correctas,
aunque parezcan aburridas.
Estoy llenando de buena vibra mi alrededor y
alejándome de todo aquello que me hacia retroceder. Mis otros dos sueños parecen estar cerca,
pero aun tengo que trabajar en ellos.
Si puedes leer esto, dame mucha voluntad de
hacer lo correcto, dame paciencia, tolerancia, respeto, y sobre todo dame amor.
Aunque parezca que es algo fácil de dar, para mí es muy difícil.
Pero, te prometo intentar.
Por Carlos Gerzon
Instagram: @elchicodelbusblog
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